Multinacionales por marca España ha publicado el Informe: “La contribución de las multinacionales extranjeras a España”, las estadísticas reflejadas en este Informe, ponen de manifiesto, que la presencia de empresas de capital extranjero en nuestro país es muy destacada y valiosa para el desarrollo de la economía española.
Evolución del empleo de la empresas extranjeras
El objetivo de este informe de Multinacionales por marca España es poner en valor dicha presencia, resaltando especialmente su contribución a la economía española en términos de inversión, empleo generado y grado de innovación. En un momento en el que parece que la economía española comienza a recuperarse, la Asociación considera conveniente resaltar esta contribución, máxime cuando ha permitido contrarrestar el impacto negativo de la crisis económica en indicadores clave como el empleo.
Los indicadores seleccionados permiten ofrecer una imagen fiel y actual de esta contribución, valorando de forma precisa el interés de las empresas extranjeras por generar riqueza en España. Partiendo de la cuantificación del número de empresas extranjeras asentadas en nuestro país y llegando al análisis de la representatividad de las empresas extranjeras en el sistema de innovación de España, los indicadores muestran como estas empresas están apostando por nuestro país como destino de sus inversiones, favoreciendo su desarrollo.
El Informe trata de poner en contexto la aportación de las empresas extranjeras a la economía, teniendo siempre en cuenta que a pesar de representar una pequeña parte del tejido empresarial español, su papel en el volumen de negocio, generación de empleo y actividad innovadora es muy relevante. Los análisis que se presentan a lo largo del Informe refuerzan la necesidad de considerar a las multinacionales extranjeras como agentes clave de la economía española, que merecen un trato igualitario respecto a las empresas de capital nacional, dado su compromiso con los objetivos de potenciar la creación de empleo, de fomentar la inversión productiva y de promover la actividad innovadora, elementos imprescindibles para retomar cuanto antes la senda del crecimiento.
Entre las conclusiones del Informe destacan:
- La contribución de las empresas extranjeras a la economía española se ha mantenido, e incluso aumentado, en los años de crisis económica que ha experimentado nuestro país.
- El número de filiales de empresas extranjeras en España no ha dejado de crecer en los últimos años, demostrando el interés de estas empresas por participar en nuestra economía.
- Las filiales de empresas extranjeras generaron el 26% del volumen de negocio de nuestro país en 2011, creciendo a una tasa anual del 3% entre 2008 y 2011.
- En 2012, se pusieron en marcha 278 proyectos de inversión extranjera directa (IED), situando a España como el tercer país europeo por número de proyectos de IED.
- España se situó en 2012 como la decimocuarta economía mundial que más flujo de inversión extranjera directa recibió (27.750 millones de dólares).
- En 2013 la IED productiva bruta alcanzó los 15.814 millones de euros, un 8,8% más que en 2012.
- La inversión extranjera en España ha posibilitado la creación de 1,24 millones de puestos de trabajo.
- Las filiales de empresas extranjeras establecidas en España han conseguido mantener el nivel de empleo a pesar de la fuerte crisis económica en la que está inmersa España.
- El porcentaje de empresas innovadoras con capital extranjero es muy relevante (10,2%). En el caso de las grandes empresas este porcentaje se eleva al 32,8%.
- El porcentaje de empresas que realizan actividades de I+D que cuentan con capital extranjero también es destacado (12,4%). En el caso de las grandes empresas vemos de nuevo como el porcentaje aumenta notablemente, hasta alcanzar el 34,5%.
Los datos que incluye este Informe ponen de manifiesto la relevante contribución de las empresas extranjeras a nuestra economía, que ha permanecido estable a pesar de la crisis económica y que muestra signos esperanzadores de crecimiento para los próximos años. Para ello, la consolidación de un marco institucional y regulatorio estable, que no dificulte la IED, se antoja imprescindible.