Tres de cada cinco (59%) suscriptores de plataformas de vídeo en streaming en España aseguran sentirse frustrados al utilizarlas. De hecho, un 54% de los usuarios en nuestro país cree que usar servicios de búsqueda alternativos mejoraría su experiencia. Estos son algunos de los datos del último informe de Accenture, El streaming del futuro: retos y estrategias para dar respuesta a nuevos hábitos de consumo, basado en una encuesta a 6.000 usuarios de todo el mundo para conocer sus preferencias, creencias y comportamientos en sus experiencias de consumo de vídeos en streaming.
Los resultados de la encuesta reflejan que España es el país en el que más tiempo se dedica a la búsqueda de contenidos. Concretamente, el 57% de los usuarios en España pasa más de seis minutos buscando un vídeo para ver, cifra que en la media global es del 44%.
Escoger contenido interesante resulta un reto y es que los consumidores piensan que más del 60% de los contenidos por los que pagan no son relevantes para ellos. En este sentido, la mayoría de los españoles y resto del mundo demanda más personalización. De hecho, un 56% señala que le gustaría poder compartir los datos de su perfil con diferentes servicios de streaming para recibir una oferta de contenido más ajustada a sus preferencias y el 42% de los españoles (y el 51% de media global) afirma que su satisfacción aumentaría si las recomendaciones de los servicios a la carta estuviesen personalizadas teniendo en cuenta sus intereses personales, estado de ánimo o ubicación.
Los usuarios en nuestro país también hacen hincapié en el precio de estos servicios. El 64% asegura que es demasiado caro pagar por las suscripciones de entretenimiento que quiere tener y el 31% (dos puntos por debajo de la media global) planea reducir su gasto mensual en servicios de streaming en los próximos 12 meses.
«A través de nuestra investigación, los consumidores afirmaron que la experiencia de consumo de vídeo en streaming se ha convertido en algo poco manejable y caro para muchos de ellos», según Adolfo Rodero, managing director de Medios de Accenture en España, Portugal e Israel. «Se necesita un gran cambio en el ecosistema de streaming para dar a los consumidores un mayor control sobre su experiencia y una relación más sencilla y racional con sus proveedores de contenido: la incorporación de un agregador de contenidos inteligente, asentado en múltiples plataformas, acuerdos de comercialización y reventa de contenidos más flexibles y una estrategia de contenidos y producto consistente con esta estrategia de simplificación».
El estudio de Accenture también revela que la experiencia de navegación resulta cada vez más frustrante a los usuarios debido al el creciente número de contenidos y servicios que se ofrecen. Los agregadores de contenido pueden resolver este problema unificando el acceso a todos los servicios de streaming mediante un software de aplicación y acuerdos de intercambio de datos y contenidos. Pueden fomentar la flexibilidad y la personalización para los espectadores sirviendo como una plataforma única con contenido seleccionado específicamente para cada usuario.
«Los consumidores no manifiestan una gran preferencia por una empresa concreta que les ofrezca una mejor experiencia de usuario», señala Alfonso Imbroda, managing director de Accenture Song. «La gente demanda innovación y simplicidad en este espacio y busca que una empresa presente nuevas y mejores ideas para ofrecerles y recomendarles contenidos relevantes de una forma ágil, que les facilite la vida y les haga más agradable la experiencia de verlos”.
El informe también ofrece las siguientes recomendaciones a las empresas del sector del entretenimiento en streaming -desde vídeo, música y podcasts hasta juegos- para que puedan iniciar una relación más estrecha con los consumidores:
- Tener en cuenta el papel de los agregadores en el sector. Hay que determinar si se quiere ser un integrador o el integrado, de modo que se pueda dar forma a los acuerdos de distribución para atraer tanto a los servicios de vídeo bajo demanda por suscripción (SVOD por sus siglas en inglés) como a los de vídeo bajo demanda basado en la publicidad (conocido por sus siglas en inglés AVOD), así como asociarse con las entidades que compiten por ser el integrador preferido.
- Planificar un modelo de datos distribuidos. Invertir en la privacidad de los datos y en dar a conocer ese compromiso a los consumidores para que se sientan seguros al compartir datos que son fundamentales para los servicios de integración y personalización.
- Prepararse para crecer. Pensar más allá de los servicios SVOD y AVOD y considerar los servicios de música, podcast y libros electrónicos, videojuegos, seguridad en el hogar, servicios de entrega de alimentos y otros.
- Participar en la experimentación. Aquellos que tienen la experimentación basada en datos en el centro de su funcionamiento estarán mucho más preparados y serán más ágiles para adaptarse a las cambiantes preferencias de los consumidores.
Más información y conclusiones sobre el informe: El streaming del futuro: retos y estrategias para dar respuesta a nuevos hábitos de consumo